"No es el momento de hacer reproches al PSE y menos hacia Nicolás Redondo Terreros. No es el momento de exigir responsabilidades individuales y concretas, sino de hacer un planteamiento político que garantice el futuro de Euskadi desde el punto de vista de la gobernabilidad", dijo a Telecinco.

Según el dirigente socialista, el PSE "no ha disminuido su apoyo popular" en el País Vaco, "aunque sí su representación", por lo que apostó por hacer un "análisis de los errores que todos hemos cometido a la hora de hacer un diagnóstico de lo que pasaba en el País Vasco".

Tras afirmar que no descarta a corto plazo un encuentro entre el "lehendakari" en funciones, Juan José Ibarretxe, y el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, Blanco señaló que su formación política tenía muy difícil trasladar durante la campaña un mensaje diferente "que no fuera una apuesta por la lbertad y la convivencia".

Blanco manifestó que, "de cara al futuro, tenemos que reafirmar un proyecto autónomo, que tenga vocación de responder a los valores y las inquietudes que siempre ha defendido el PSOE".