A su juicio, hay motivos suficientes para alzarse contralo que considera la política educativa de un Gobierno "despótico", como son "el pésimo nivel de la educación en España, la politización de la enseñanza y el intervencionismo del Estado en el derecho de los padres a elegir la enseñanza de sus hijos".

Durante su intervención en una jornada de debate organizada por el diario "La Razón" y la Universidad San Pablo-CEU, bajo el título "La educación, a examen", Carbonel se mostró pesimista ante "una contrarreforma de la Ley de Calidad de la Enseñanza que quieren sacar sin consenso y sin que aporte ninguna innovación positiva".

El presidente de la CONCAPA añadió que, para ser efectiva la libertad de enseñanza, "se precisan centros escolares que aporten una educación acorde con los valores que ya se inculcan en casa y que haya acceso gratuito a los mismos".

REFORMA EDUCATIVA

En la jornada de debate también participó la secretaria ejecutiva de Política Social y Bienestar del Partido Popular, Ana Pastor, quien denunció que "tenemos uno de los peores sistemas educativos públicos del mundo".

Pastor apostó por una reforma educativa encaminada a conseguir "mayores y mejores oportunidades para todos los alumnos, la libre elección de la enseñanza por parte de los padres, que se eleve el nivel de conocimiento y se respete el esfuerzo de los escolares".

La dirigente popular aseguró que su partido es favorable a un pacto de Estado por la educación y, en este sentido, invitó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a mostrar esa misma disposición.

"Los gestos del talante son derogar sistemáticamente leyes de gobiernos anteriores y no dialogar con el principal partido de la oposición", concluyó la dirigente popular, quien se refirió a la LOE como la LEU, es decir, "Ley de Educación Unilateral", ya que, según criticó, "no ha sido negociada con los diferentes actores ni con las comunidades autónomas".