Pérez opinó que el nuevo Pacto de Toledo está "cargado de buenas intenciones, pero es vago e inconcreto", aunque siempre que se logra un acuerdo entre las formaciones políticas "nos parece interesante y positivo".

El dirigente ugetista advirtió, en declaraciones a Servimedia, que en las negociaciones que el nuevo Pacto de Toledo encomienda a los agentes sociales "no aceptaremos medidas que supongan recortes", ya que "no creemos que sean justas ni razonales", con una Seguridad Social en superávit hasta 2020.

Sobre la recomendación de ampliar el periodo de cálculo de la pensión, Pérez recordó que el año pasado concluyó el proceso de pasar de 8 a 15 años y "no es aceptable que se tenga que volver a hablar de esto".

El secretario ejecutivo de UGT echa en falta medidas más concretas para que la autoridad laboral rechace los expedientes de regulación de empleo que no estén justificados o que se revisen las causas de despido. Además, "no se dice nada e los despidos individuales, que son el 90% del total".

Pérez criticó que el desarrollo de la protección social se subordine a la política económica, "cuando tendría que ser al revés".

Entre los aspectos positivos, Pérez destacó que se fijen cinco años para acometer el proceso de separación de fuentes de financiación de la Seguirdad Social, que no se limiten las aportaciones al fondo de reserva, la posibilidad de compatibilizar el SOVI y la pensión de viudedad o que pueda figurar como cotizado elperiodo de atención a las personas dependientes o los hijos.