Rodríguez, uno de los asistentes a la mesa tripartita entre Gobierno, patronal y sindicatos que discute la subida de las pensiones, dijo que la propuesta gubernamental no asegura el poder adquisitivo de los jubilados, tal y como afirmaron previamente los directores generale de Seguridad Social y Empleo, Javier Jiménez y Marcos Peña.

El Gobierno pretende el cambio en la revisión de las pensiones, que se actualizarían en función de la subida de los precios prevista por la Administración para 1994, mientras que actualmente se incrementan sobre la inflación del año anterior. Para mantener el poder adquisitivo en el caso de que fallen sus cálculos, propone un cláusula de garantía a pagar a partir del 1 de enero de 1995.

Sin embargo, esta cláusula, según Apolinar Rodríguz, no garantiza el poder adquisitivo, ya que el cambio del sistema provocará que cada jubilado pierda 8.000 pesetas al año como media. Pasadas las 8 de la tarde la reunión continuaba sin acuerdo.