"Los partidos nacionalistas están moviéndose hacia atrás, a una fae que es anterior a la transición democrática española. Mientras el país ha avanzado, ellos van hacia atrás, y el nacionalismo autodenominado democrático se pone a la cola de ETA", señaló Ezkerra a Servimedia.

Ezquerra confió en que este pacto tenga consecuencias positivas, "en el sentido de que el PSE dejara de tirar los tejos al nacionalismo para formar gobierno. Hasta ahora, existía una ambigüedad, y el PSOE estaba haciendo el ridículo, insinuándose al PNV y al nacionalismo para entrar en el Gobiero, de un modo no explícito, pero lo estaba haciendo".

"De este modo quizá las cosas queden claras para ellos. El PSOE soñaba con la posibilidad de entrar en ese Gobierno, poque salió del Ejecutivo pero hasta ahora no ha sabido hacer una oposición al frente de Estella. Este frente ha fracasado, y la obligación de los partidos constitucionalistas es denunciar y evidenciar este fracaso", añadió.

Por otra parte, se mostró de acuerdo con el ministro de Interior, Jaime Mayor Oreja, en la necesidad de tmar medidas contra la inclusión de presos etarras en las listas electorales de EH. "Un partido no es democrático porque tenga votantes, y tiene que haber unos mecanismos para impedir que alguien quiera presentarse a unas listas de unas elecciones para sabotear la democracia", dijo.

"Con esta inciativa", prosiguió, "EH descubre sus verdaderas intenciones, es un acto coherente con ellos mismos, es el partido de los verdugos, y es lógico que quieran poner a los verdugos en sus listas. Está claro que es u desafío a la democracia, una burla, pero tiene de positivo que evidencia sus verdaderas intenciones, que no son ni pacificadoras ni democráticas".