En las imágenes, tomadas este sábado 23 de diciembre, se aprecia a un ternero sin su madre, ya acrotalado y agazapado en una esquina de uno de los corrales.

Noemí Pulido, coordinadora provincial de PACMA en Jaén, aseguró este martes que el animal se encontraba "aterrorizado" con el paso de las personas, las luces y los ruidos del entorno, con música permanente de fondo. "Tiene que ser una locura para un animal tan pequeño verse solo en una situación así", añadió.

"No hay ninguna necesidad de exponer a estos animales al bullicio y al gentío que tiene lugar en las ferias navideñas, donde, además, la gente puede acceder a ellos con el riesgo que eso conlleva", sostuvo Pulido, quien indicó que las redes sociales del Pacma se han “inundado” de preguntas sobre la legalidad de tener animales en belenes vivientes tras la entrada en vigor de la nueva ley de bienestar animal

“HIPÓCRITA”

La Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales, establece que "se prohíbe el uso de animales en exposiciones de belenes, cabalgatas o procesiones, en las que se mantenga al animal de forma incompatible con su bienestar, dadas las características propias de su especie, o inmovilizado durante la duración del evento".

"Mantener al animal de forma incompatible con su bienestar es un concepto muy indeterminado, sujeto a interpretación y, salvo casos muy evidentes, de difícil aplicación", recalcó Eva Ramos, asesora jurídica del Pacma.

Este tipo de eventos, que presentan a los animales como "parte de la tradición navideña", ocultan, según el Pacma, "la realidad de sus vidas en las granjas industriales, donde a menudo viven en condiciones deplorables antes de ser destinados al matadero".

Por ello, esta formación animalista consideró "hipócrita" enseñar a los niños una "imagen distorsionada de la realidad", y subrayó que no se debe enseñar a las futuras generaciones a creer que los animales son "atracciones de feria".