En declaraciones a Servimedia, Moraleda afirmó que la reforma aprobada es incluso peor que la planteada en junio pasado por el comisario europeo de Agricultura y Pesca, Franz Fischler, ya que "reduce el presuuesto destinado al mundo rural desde el 20% al 6% actual".

A este respecto, aseguró que la nueva PAC "hará mucho daño" a los pequeños productores agrícolas de las naciones del sur de Europa y planteó la posibilidad de que "países como España tengan que pagar la congelación del presupuesto europeo planteada por Francia y Alemania".

Finalmente, criticó que la reforma plantee una reducción de las ayudas directas destinadas a los agricultores sin tener en cuenta los ingresos que reciben en el ejercico de su actividad laboral, y pidió a Bruselas que establezca criterios vinculados al empleo para determinar la cuantía de las ayudas.

La reducción prevista en las ayudas directas se iniciará en 2006 y culminará en 2012. Será progresiva sobre los niveles de recepción y supondrá un recorte, para los mayores receptores, de hasta el 19% sobre las cuantías económicas actuales.