En declaraciones a Servimedia, Castro mostró su sorpresa por la "excesiva parafernalia" que rodea la reunión de los mandatarios de la Alianza Atlántia y que, dijo, "no tendría que ser una molestia para los ciudadanos, que somos los primeros que estamos aquí".

"Tenemos que ser buenos receptores", convino, "pero en todo caso la llegada de todas las comitivas no tiene que servir para incordiar de la forma que se está incordiando. Me parece excesivo para una cosa que no va a servir para nada".

En este sentido, el dirigente de la FRAVM adujo que la Cumbre de la OTAN no va a representar ningún beneficio económico para los madrileños y apuntó que a os únicos que puede favorecer es a los responsables del sector de la hostelería.

Castro sugirió a los organizadores de la reunión que celebren este tipo de encuentros en núcleos alejados de la capital para no perturbar a sus habitantes. "Parece como si estuviéramos tomados", recalcó. "Yo creo que estas cosas se deberían hacer incluso muy a las afueras de nuestra ciudad, en un sitio donde no se importunara tanto".

Respecto a los problemas que la cumbre está ocasionando a los propietarios de vehícuos para aparcar y para circular por Madrid, el presidente de las asociaciones de vecinos indicó que "es bueno que la gente se acostumbre a utilizar el transporte público, porque es bueno para la calidad de vida, pero por la situación que se está creando da la impresión de que los demás tienen más derechos que los que están aquí".