No obstante, también podrá reincorporarse si lo desea a su plaza de funcionario de prisiones en el centro penitenciario de Soria, al que Ortega Lara había solicitado su traslado desde la prisión de Logroñoantes de su secuestro.

Todo dependerá de la evolución física, pero sobre todo psíquica, que experimente el funcionario en las próximas semanas. De momento, su situación es equivalente a la de baja por enfermedad.

Desde que se produjo el secuestro, su familia ha percibido regularmente el salario correspondiente a su categoría y responsabilidad como funcionario de la prisión de Logroño, una situación que se mantendrá en los días siguientes durante su recuperación.

Precisamente, días después deser secuestrado por ETA, la Dirección General de Instituciones Penitenciaria autorizó su traslado del centro penitenciario de Logroño a la prisión de Soria, petición que había realizado para estar más cerca de su familia, residente en Burgos.

Las fuentes consultadas por Servimedia señalaron que lo más lógico es que Ortega Lara decida no volver a trabajar como funcionario en un centro penitenciario y solicite un traslado a cualquier otra ocupación dentro del Ministerio del Interior. No obstante, apuntaon que siempre dependerá de los deseos personales del propio funcionario.