Dicho fondo reuniría 500 millones de dólares concedidos por los diversos países, que permitirían responder en un plazo máximo de tres a cuatro días a cualquier crisis humanitaria. Si la Asamblea General aprueba la propuesta de Egeland, el fondo estaría operativo a principios de 2006.

Jean-Louis Schiltz, ministro de Desarrollo de Luxemburgo, precisó que "seis países, Suecia, Reino Unido, Noruega, Holanda, Suiza y Luxemburgo, ya han anunciado una contribución total de 150 millones".

Por otra parte, Egeland manifestó su deseo por la formación de nuevos miembros del personal humanitario. "Deseamos también contar con la experiencia de las ONG y poder desempeñar un papel motor de su puesta en marcha", añadió.