Según ha comunicado la ONU, el acuerdo establece la retirada definitiva de las tropas nigerianas en un plazo de 60 días de Bakassi, territorio que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) concedió a Camerún en 2002.

La Península de Bakassi, rica en petróleo, está habitada por entre 200.000 y 300.000 personas, en su mayoría de nacionalidad nigeriana. Estos factores, unidos al hecho de que la CIJ resolviera que diversas zonas de este territorio pertenecía a Camerún, avivó un conflicto fronterizo que ha dejado miles de muertos.

Aunque en un primer momento Nigeria se negó a acatar la decisión de la CIJ, acabó por aceptar la intermediación de la ONU. Ayer, Obasanjo y Biya se reunieron en Nueva York con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, para proceder a la firma del acuerdo definitivo.

El presidente nigeriano consideró que "la firma del acuerdo marca un gran logro en la prevención de conflictos" y sostuvo que "debe convertirse en un ejemplo a seguir para la resolución de situaciones similares en África y en todo el mundo".

Por su parte, el camerunés Biya señaló que "la razón y la sabiduría fueron las guías que condujeron a este final. Con este acuerdo nos hemos armado con un instrumento para poner en práctica la decisión de la Corte, concluyendo definitivamente nuestra disputa fronteriza".

El acuerdo estipula que en dos años deberán adoptarse las medidas pertinentes para completar la demarcación de cuatro áreas de la península según el fallo de la CIJ de 2002. Además, el nuevo tratado permitirá a la población nigeriana permanecer en el territorio o regresar a su país si lo desea.

Annan, que ha realizado una intensa labor diplomática entre ambos países, destacó tras la firma que "la ceremonia de suscripción que nos ha reunido corona un experimento notable en la prevención de conflictos por parte de Camerún y Nigeria".