Eide se ha basado en un informe realizado por la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán (Unama) y la Comisión Independiente de Derechos Humanos en Afganistán, que afirma que la inseguridad está teniendo un grave impacto sobre los preparativos para las elecciones afganas, especialmente entre las mujeres.

El informe subraya que los ataques y las amenazas han limitado gravemente la libertad de circulación y de expresión para los candidatos y simpatizantes, lo que dificulta su capacidad para hacer campaña abiertamente a través de reuniones públicas o visitas puerta a puerta.

Eide considera "evidente" el interés mostrado por la ciudadanía para participar en las elecciones, pero advierte de que la violencia en el país impedirá a algunos electores acudir a votar.

"La inseguridad afectará a la participación en el día de la votación. No hay ninguna duda al respecto. Está claro que no todas las casetas estarán abiertas el día de los comicios, pero creo que habrá más centros de votación en estas elecciones que en las de 2004-2005", apostilló Eide.

Además, indicó que en estas elecciones habrá más observadores nacionales e internacionales, si bien instó a las partes en conflicto a no bloquear los caminos para que los afganos puedan cumplir con el derecho que les otorga la Constitución a participar en la elección de sus gobernantes.

Asimismo, llamó a todos los candidatos, organizaciones y líderes políticos a respetar los resultados de los comicios y a sumarse a un consenso nacional en beneficio del país.