La Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navi Pillay, calificó de "hito importante" este acuerdo porquepone de relieve "la evolución de la comprensión de los derechos humanos en nuestras sociedades" después de "más de una década de debate".

"Las empresas, a veces intencionadamente, pero más a menudo inadvertidamente, también pueden impedir la realización de los derechos humanos, directa o indirectamente, como resultado de sus propias acciones", añadió Pillay.

La resolución se alcanzó después de que el representante especial del secretario general para las Empresas y los Derechos Humanos, John Ruggie, presentara su informe ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra (Suiza), que fue respaldado por los 47 países del Consejo de Derechos Humanos.

Ruggie destacó que "nunca ha habido un momento crítico" en la relación entre empresas y derechos humanos. "Los derechos humanos están en mayor peligro en tiempos de crisis y las crisis económicas suponen un riesgo particular para los derechos económicos y sociales", apostilló.