En un comunicado, ese organismo de la ONU subrayó que esas mujeres y los hijos recién nacidos son víctimas invisibles de la actual operación militar de Israel.

Según Unfpa, unas 170 mujeres dan a luz diariamente en la franja y las actuales operaciones militares impiden a la mayoría de ellas salir de sus casas para recibir la asistencia médica que necesitan. "Esto pone en peligro sus vidas, y en particular, a las que necesitan cesáreas", apuntó el Fondo.

Asimismo, Unfpa expresó alarma por el aumento de los partos prematuros provocados por los sustos y el trauma de los bombardeos, y los riesgos de los bebés prematuros de sufrir hipotermia por la falta de electricidad.