El incidente más grave se produjo en los talleres del rotativo "El norte de Castilla", en Valladolid, cuando un piquete intentó impedir la salida de los ejemplares del periódico a primeras horas de la madrugada. Esta acción fue respondida por miembros del Cuerpo Nacional de Policía y se saldó con una persona herida leve.

En Salamanca fueron detenidas nueve personas que portaban silicona, pegamento y otros produtos similares para bloquear cerraduras, mientras que en Zamora fue detenido otro individuo. Todos ellos fueron puestos en libertad a las pocas horas.

En León fue detenida una joven, que paso a disposición judidial, al ser reconocida como la autora de la rotura del cristal de un autobús urbano.

Arsenio López destacó la actuación generalizada de piquetes, algunos de ellos muy numerosos, que, aunque en general no fueron violentos, adoptaron a veces actitudes amenazantes.

Según el delegado del Gbierno, se detectó la presencia de piquetes en las panificadoras, en los mercados centrales y de abastos, en las salidas de autobuses que trasportaban a los trabajadores y en las puertas de los grandes centros comerciales.