Según un comunicado hecho público hoy, en la Declaración sobre Libertad de Prescripción la OMC insiste en el deber deontológico de prescribir con responsabilidad y moderación "a la hora de prevenir, diagnosticar y tratar la enfermedad".

El documento recuerda que existe la obligación de denunciar ante los pacientes, los organismos gestores o la comundad social, a quienes limitaran indebidamente esa libertad.

"La nueva declaración", añade la nota, "manifiesta que no es conforme a la ética médica los pactos, contratos o reglamentos que restrinjan la legítima libertad de decisión del médico o que le impongan por coerción o premio, conductas que el médico encuentra injustificadas".

También recuerda que estos profesionales tienen el derecho y deber de someter sus contratos al visado de su colegios y que de no hacerlo incurren en una falta disciplnaria menos grave.