Así lo reclamó en un comunicado en el que lamentó que, a pesar de que en 2021 el Tribunal Supremo le “dio la razón” en una sentencia que “indicaba” el carácter “abusivo” de “varias” de las cláusulas de esta política, la aerolínea “está haciendo caso omiso a la justicia y continúa desarrollando prácticas abusivas”.

En este contexto, puntualizó que una “práctica recurrente” por parte de la compañía consiste en que los usuarios reciben mensajes de “error” tanto en la web como en la aplicación de la empresa al tratar de realizar el ‘check in’ de los vuelos y, “como consecuencia”, se ven obligados a acudir al mostrador de la empresa en el aeropuerto para llevar a cabo allí el trámite.

“Cuando llegan, se encuentran que, para hacer el ‘check in’ e imprimir la tarjeta de embarque, la compañía les cobra entre 30 y 60 euros por pasajero”, advirtió, para añadir que, al mismo tiempo, en el caso de los vuelos adquiridos a través de terceros, como Edreams, Ryanair solicita la identificación del viajero a través de foto del usuario e imagen del DNI.

A su juicio, esta solicitud de identificación adicional es “innecesaria” y constituye un “abuso” al “poner trabas” al ‘check in’ cuando el usuario no adquiere directamente el vuelo en sus plataformas.

Por todo ello, la asociación de consumidores se ha dirigido a Ryanair para solicitar a la compañía que “cese de manera inmediata esta práctica comercial abusiva”.

En caso de que haga “caso omiso”, dará traslado de los hechos a la Dirección General de Consumo para que investigue y sancione las infracciones que detecte.