La sentencia, de fecha del pasado 15 de febrero, pero que se ha conocido hoy, fue valorada por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, quien aprovechó para pedir a todos los madrileños y a los grupos políticos de la oposición que se sumen a este "gran proyecto de remodelación de la M-30".

Según la sentencia, lo proyectos de reforma de la M-30 respetan la legislación vigente y las competencias municipales. El tribunal reconoce que la M-30 es una vía urbana y que, por lo tanto, el ayuntamiento puede ejecutar las obras mediante los procedimientos ordinarios de reforma, sin que se precise, como piden los vecinos, una modificación del Plan General de 1997.

Además, el juzgado establece que estas obras no precisan de sometimiento a estudio de impacto ambiental porque no contemplan obras en una carretera que supongan su ensanche" y porque no son obras a ejecutar en una carretera, sino en vía pública. También señala que no consta que el consistrio tenga intención de incumplir las condiciones del informe emitido por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en relación con las obras de la M-30.

Respecto a los edificios cercanos al trazado de los túneles, la sentencia dice que "los proyectos han tenido muy en cuenta la existencia de tales inmuebles y están redactados de forma que su ejecución no afecte a los mismos". Además, añade que se mantendrá un avanzado sistema de auscultación del terreno que detectará en tiempo real cualquier posible movimiento, para adoptar con inmediatez las medidas que lo corrijan y que garanticen la integridad de los edificios.

La sentencia también recoge que se tratará de preservar el arbolado existente "en lo posible" y que se realizará el trasplante y la reposición de los afectados por las obras; y hace referencia al trenzado entre la salida de la avenida de la Ilustración y el tráfico proveniente de la carretera de Colmenar y de la avenida del Cardenal Herrera Oria, señalando que las obras supondrán una disminución apreciable del tráfico que utiliza este trenzado y, por tanto, de la movilidad.

EL ERROR DEL METRO Gallardón expresó su satisfacción por esta sentencia y dijo que "es una más de las resoluciones judiciales que coinciden con el dictámen del Consejo de Estado". Aseguró que la reforma de la M-30 es la obra más extraordinaria, que mejorará la calidad de vida de los madrileños, reducirá de manera sustancial la siniestralidad y favorecerá al medio ambiente al reducirse las emisiones contaminantes y liberar espacios para zonas verdes.

Se mostró orgulloso de estas obras y recordó, en relación con las denuncias ante Bruselas de los grupos políticos de la oposición, que "los mismos que se opusieron a la ampliación del Metro en su día son los que hoy se oponen a la M-30. Yo les digo que tengan confianza y les invito a sumarse a este gran proyecto, porque hoy nadie se queja de que se ampliara el metro porque fue bueno".

Pidió a la oposición que rectifique, que reconozca que no fue inteligente oponerse a la ampliación del Metro y que no cometa el mismo error. "Yo creo que lo que hay que hacer es mirar hacia el futuro y sumarse a este reto de modernidad y no insistir en ese error del Metro y sumarse a esta obra", concluyó el alcalde.