Así se pone de manifiesto en la "Memoria Obra Social 2001", elaborado por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), y presentada hoy por su presidente, Juan José Quintás.

Quintás destacó la labor social de las cajas como respuesta a las demandas y carencias sociales que pone de manifiesto la sociedad y subrayó que su línea de actuación se dirige a cubrir las "lagunas" a las que no llega la cobertura ofrecida por el Estado.

En este sentio, destacó la cooperación y colaboración con las diferentes Administraciones, si bien advirtió que "nos resistimos a estar sometidos", en referencia a la independencia de las Cajas para abordar los cometidos de su Obra Social.

Según la memoria, las Cajas destinaron 969,121 millones de euros en 2001 a diferentes acciones sociales, con un aumento del 11,1% respecto al año anterior. Esto supone, según dijo Quintás, que se dedica una media del 25,5% de los beneficios totales del sector a su Obra Social. El máximo responsable de la CECA destacó cómo la evolución de las preferencias de los españoles en cuanto a materia social se han ido variando conforme el Estado ha ido cubriendo desterminadas necesidades. Así, explicó que la sociedad focalice sus demandas en asuntos como la cultura musical, la prevención del envejecimiento de la población o el cuidado e integración de los discapacitados, y no sólo a paliar la pobreza.

DISCAPACIDAD

Del total invertido por la Obra Social durante el 2001, el 47,6% ue reclamado para actividades relacionadas con el ocio y la cultura, una tendencia al alza desde 1997. También creció el gasto destinado a educación, al cuidado del patrimonio y a mejorar el medio ambiente.

Por contra, las demandas de recursos para la vertiente social y sanitaria se mantuvieron en la misma línea del año 2000, con un gasto total de 224,299 millones de euros.

Quintás destaco que en el 2001 las Cajas tenían en funcionamiento 302 centros de día (6 por provincia española) y 189 residecias de ancianos. Así, durante el 2001 se invirtieron 28,244 millones de euros en necesidades de las personas mayores.

La memoria tiene en cuenta también la especial dedicación de la Obra Social de las Cajas al cuidado y mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad, a lo que se destinó 12,5 millones de euros (más de 2.000 millones de pesetas).

Las aportaciones de las Cajas se realizaron mediante el pago directo de gastos de residencias, unidades asistenciales y talleres ocupacionles o bien mediante subvenciones a la explotación de este tipo de centros. También participan en programas asistenciales y en ayuda directa a asociaciones.

Con todo esto, Quintás aseguró que las Cajas siguen "siendo fieles" a sus principios fundacionales de ayuda a la sociedad y que su mayor interés pasa por responder a las necesidades de los ciudadanos.