Según manifestó Juan Gómez, portavoz del Movimiento de Objeción de Conciencia (MOC), este convenio obedece a la presión que ejerce la dministración sobre muchas organizaciones no gubernamentales (ONGs) para que acepten acoger objetores de conciencia a cambio de asegurarles las subvenciones económicas que solicitan.

De igual forma opina Angel Luis Pérez González, portavoz de la Asociación de Objetores de Conciencia (AOC), que señaló como a las ONGs Asociación Pro Derechos Humanos o IEPALA se les retiró la subvención por negarse a acoger objetores.

El representante de la AOC refirió la situación en la que puede quedar Cáritas en elación con este convenio, ya que esta organización de la Iglesia se ha negado a acoger objetores en su seno en años pasados, al encontrarse con una oposición dentro de su organización que defiende la objeción de conciencia legítima y no la legal que propone la ley.

El MOC considera que este convenio puede ser contraproducente para la propia labor que desempeña el voluntariado de las organizaciones de la Iglesia, ya que los objetores no se sienten motivados para desempeñar esa labor.

Ambas organiaciones de objetores, que se pronuncian contra la Ley de Objeción de Conciencia, entienden que la PSS debe ser voluntaria y no obligatoria y que el Gobierno pretende con ello ocupar puestos de trabajo sin pagarlos, por lo que se oponen a realizarla en un organismo público o en una ONG.