La cantidad simbólica que las autoridaes de Andorra pagan a sus copríncipes a través de la "questia" es de 450 pesetas anuales, que entregan cada dos años de forma sucesiva al copríncipe español, el obispo de la Seu d'Urgell, y al francés, el presidente de la República francesa, Francois Mitterrand.

Durante el acto de entrega de las 900 pesetas del impuesto al obispo de la Seu, éste manifestó su deseo de que el pacto entre Andorra y sus copríncipes sea sustituido por la Constitución y que a partir de ahora el pueblo andorrano asuma sus reponsabilidades.

Martí Alanís anunció también la creación de una nueva fundación destinada a salvaguardar el respeto por el estado de derecho y los derechos de los ciudadanos de Andorra y dijo que las 900 pesetas de la última "questia" que recibía servirían, de manera simbólica, como primer capital para la entidad.

El obispo de la Seu d'Urgell alertó asimismo sobre el peligro de "afrancesamiento" que puede correr Andorra si no se resuelve de forma correcta la cuestión de la representación de los cpríncipes en la firma de los nuevos tratados internacionales.

En opinión de Joan Martí Alanís, es necesario un control de los copríncipes sobre las decisiones que podrían hipotecar la independencia andorrana.

Por su parte, el síndico general de Andorra, Jordi Farrès, se comprometió en su discurso a acercar puntos para colaborar con los dos copríncipes en el futuro.