Toda la oposición criticó aPujol las medidas para afrontar la situación económica y la pasividad a la hora de fomentar el empleo. Los portavoces de ERC, Iniciativa per Catalunya, PP y el Grupo Mixto recriminaron al Gobierno catalán su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado.

Otra de las críticas realizadas por los grupos parlamentarios a Pujol ha sido su excesiva voluntad de intervenir en la política española en detrimento de la catalana y de la situación del autogobierno catalán.

Obiols expuso la necesidad de frenarla expansión que del déficit autonómico generado en los últimos años y pidió al Gobierno de la Generalitat un informe de urgencia sobre el desequilibrio territorial de Cataluña y un programa catalanista para finales de siglo. Pujol, en su réplica, le aseguró que una de las prioridades de CiU es fortalecer la realidad nacional catalana.

El secretario general de Esquerra Republicana (ERC), Angel Colom, solicitó la renegociación del Estatuto de autonomía y acusó a Pujol de empobrecer y discriminar Catalua a través de su apoyo a la política estatal. En su opinión, la exposición del líder de CiU sobre política general fue propia de un estadista y "en clave española".

El político republicano criticó el "apuntalamiento" que ha hecho CiU de una política española que nunca ha aceptado, dijo, la realidad nacional de Cataluña y que la margina económicamente. Colom le pidió también que asuma ante el Gobierno socialista el problema de la financiación de los municipios.

El portavoz de Iniciativa per Cataluya, Joan Saura dijo que su partido haría llegar al Gobierno catalán un documento con 40 ó 50 medidas para crear empleo y repartir el trabajo, mejorar las prestaciones sociales para los más desprotegidos y poner en marcha una política industrial activa. Sobre la cuestión de la financiación autonómica, pidió a Pujol que salga de su insatisfacción permanente y que consensúe con las fuerzas catalanas las reivindicaciones.

Además de considerar al Gobierno de CiU corresponsable de la política económica inclida en los Presupuestos del Estado, criticó las horas extras que hacen los funcionarios autonómicos, con las cuales, dijo se podría manetner una empresa de 1.000 trabajadores durante un año.

El líder de CiU defendió en su turno de réplica la política de ayudas a las empresas por parte de la Generalitat y dijo que el proyecto de Presupuestos Generales aporta las soluciones que deben afrontar unos Presupuestos ante un problema como el del paro.

CUATRO ERRORES

El portavoz y presidente del PP cataln, Aleix Vidal-Quadras, acusó a Pujol de cuatro errores considerados políticamente graves: apoyar al Gobierno central en un proyecto económico que ha elevado el déficit público, dar prioriodad a la cuestión autonómica en lugar de anteponer la económica, exigir contrapartidas a cambio de colaborar con el Ejecutivo del Estado y de favorecer la intervención del sector público en el privado.

Pujol advirtió en su intervención posterior la falta de un programa económico claro por parte de los populares y dio que CiU seguiría interviniendo en la política española, aunque poniendo condiciones. No obstante, añadió que eso no podía llamarse mercantilismo sino la propia esencia de la práctica política.

El único diputado del Grupo Mixto, Josep Maria Reguant, expulsado de Esquerra Republicana hace dos meses, recriminó al Gobierno de la Generalitat haber aceptado un modelo "insuficiente" de financiación autonómica y calificó el discurso pronunciado ayer por Pujol de #claudicante#.