El 'lehendakari' del Gobierno vasco, José Antonio Ardanza, presidió en Galdácano el funeral de cuerpo presente por el agente de la 'Ertzaintza' José Luis González Villanueva.

El funeral se celebró en la capilla de Santa María y a él asistieron la viuda del agente, embarazada de siete meses de su primer hijo. En el exterior del templo se encontraban para recibir el cadáver cientos de compañeros del policí asesinado, que aplaudieron cuando el féretro cruzaba la entrada del templo.

Junto al 'lehendakari' se encontraban el consejero de Interior, Juan María Atutxa; el gobernador civil de Vizcaya, Daniel Arranz; el "Ararteko" (Defensor del Pueblo Vasco), Xabier Markiegi, y una delegación de la Guardia Civil.

El gobernador civil de Vizcaya, Daniel Arranz, condenó el doble asesinato y destacó que "se pone en práctica y hasta las últimas consecuencias la ponencia 'Oldartzen' de KAS, que ha triunfado en H".

Arranz hizo un llamamiento "a todos los partidos del Pacto de Ajuria Enea y a la sociedad civil" para que se movilicen frente a los violentos, porque, según el gobernador, "si no lo hacemos van a terminar ganándonos".

Mientras tanto, en la parroquia de la Asunción de Zumárraga se celebraban los funerales por el otro 'ertzaina' asesinado, Iñaki Mendiluze, acto al que asistieron, entre otros, el viceconsejero de Interior, José Manuel Martiarena; el gobernador civil de Guipúzcoa, Juan María Jáureui; el teniente coronel José Ignacio Laguna, jefe del cuartel de Intxaurrondo; el fiscal jefe de la Audiencia Provincial de San Sebastián, Luis Navajas, y el presidente del Parlamento vasco, Joseba Leizaola.