El número de huelgas aumentó un 10,08% respecto al mismo periodo del pasado año y el de huelguistas subió un 22,02%. En los ocho primeros meses del año se perdieron un total de 8.444.864 horas de trabajo, un 4,84% menos que el año anterior.

En el caso de la conflictividad estrictamente laboral -la que resulta de deducir de dichas cifras las huelgas protagonizadas por funcionarios o trabajadores empleados en servicios de carácter público y aquellas tras que respondieron a motivaciones de índole extralaboral-, durante el primer semestre del año se registraron 320 paros.

En estas 320 huelgas participaron un total de 206.211 trabajadores y en ellas se perdieron 5.557.890 horas de trabajo. En comparación con el mismo periodo del año anterior, el número de huelgas subió un 11,50% y los trabajadores implicados aumentaron un 42,38%, mientras que las horas no trabajadas cayeron un 1,90%.