El1818 (sustituto del 1003) es gestionado por Telefónica con tarifas reguladas por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT). Una llamada cuesta lo mismo que al 1003, es decir, 35 céntimos de euro. Además, Telefónica no puede ofrecer servicios de valor añadido con ese número, como por ejemplo conectar directamente al cliente con el número buscado.

Por su parte, TPI, que ha comenzado esta semana a prestar servicio con el 11888, no sólo proporciona el número solicitado y puede conectar al usario con él, sino que además se puede saber qué establecimiento, restaurante o servicio, por ejemplo, está más cerca de un determinado lugar.

Esto lógicamente es más caro. TPI cobra 1,25 euros por los primeros 90 segundos y 50 céntimos más por cada minuto añadido, es decir, 3,5 veces más que con el 11818 si sólo se desea encontrar un número de teléfono.

Y si la llamada al 11888 (TPI) se efectúa desde un móvil, el primer minuto cuesta 1,1 euros (IVA aparte) y 65 céntimos por minuto a partir del prmer minuto.

El mercado de información telefónica del 1003 mueve 77 millones de euros al año. Por eso, hasta ahora la CMT ha concedido 14 números de información que comienzan por 118 a 11 empresas, si bien las que no son de Telefónica se quejan de que la operadora no está facilitando la interconexión a sus bases de datos pese a que estaba previsto que podían utilizar los nuevos números desde el 1 de enero de 2003.