Escrivá presentó hoy en rueda de prensa las nuevas publicaciones del Servicio de Estudios del BBVA "EuropaWatch", "LatinWatch" y "Situación España", en las que se analizan las perspectivas económicas mundiales, europeas, latinoamericanas y españolas, y se realiza un análisis bastante optimista sobre la evolución de la economía mundial en los próximos dos años.

Según el BBVA, la economía española continuará creciendo por encima de la media europea en 2005 y 2006, con aumentos del 3% y 2,8% en cada ejercicio. Preguntado por la previsión de crecimiento del 4% dentro de 18 meses realizada ayer por Miguel Sebastián, director de la Oficina Económica del Presidente del Gobierno, Escrivá dijo que las tasas de crecimiento previstas por el BBVA "son buenas tasas".

El BBVA cree que España mantendrá su patrón de crecimiento en los próximos años. A su juicio, las condiciones financieras holgadas, con unos tipos de interés muy bajos, se mantendrán, ya que el BBVA no prevé un aumento de tipos en Europa hasta el primer semestre de 2006. Igualmente, cree que la inmigración aumentará la capacidad productiva de la economía española.

El BBVA estima que la revisión de la EPA, que ha aflorado cerca de un millón de ocupados más, casi todos inmigrantes, ha incrementado el nivel de empleo en 2004 el 5%, con un crecimiento que ha pasado del 2,5% al 4%. Además, calcula que esa población ocupada "descubierta" incrementará el nivel del PIB entre 1995 y 2004 alrededor de un 5%.

Sobre el impacto que este empleo de inmigrantes aflorado tendrá en las tasas de crecimiento económico de los últimos años, Escrivá dijo que no cambiarán mucho las tasas y que dependerá de en cuántos años hayan aflorado esos empleos y de los cambios que ocasione en la productividad. "Tendrá un impacto, si es al alza o a la baja no lo sabemos", señaló.

Escrivá advirtió de que el modelo de crecimiento basado en una intensidad del uso del empleo cada vez mayor puede tener límites y dijo que debe combinarse con mejoras en la productividad. Para ello, pidió mayor flexibilización del mercado de trabajo y de los mercados de bienes y servicios.

Sobre el sector exterior, el BBVA cree que la balanza por cuenta corriente seguirá en una situación "fuertemente deficitaria" en 2005. Explicó que este déficit se debe sobre todo a la falta de dinamismo de la demanda exterior, ya que España ha hecho un gran esfuerzo en precios con la contención de costes y salarios; y auguró un aumento de las exportaciones por la recuperación económica de los países de la Eurozona.

En cuanto a la inflación española, Escrivá dijo que no se deteriorará más y que se situará en niveles cercanos al 2,5% en 2005 y 2006. A su juicio, el diferencial de inflación de España con Europa será de alrededor de un punto y "vemos difícil que ese punto se reduzca sustancialmente en 2005 y 2006".

PETROLEO

Respecto al precio del petróleo, el BBVA cree que su precio se situará en 2005 en un promedio de 43 dólares el barril, muy por debajo de las estimaciones del mercado de futuros (52 euros). Para Escrivá, hay una sobrevaloración del efecto de la demanda de China y una sobrevaloración del impacto del precio del petróleo en las economías.

En el caso de España, el BBVA cree que un aumento del precio del petróleo del 10% en ese escenario de precios que baraja la entidad para este año tendría un impacto negativo en el PIB español de sólo tres décimas distribuidas en tres años.