El encuentro de hoy sólo supone una primera toma de contacto entre ambas partes para buscar una salida a la crisis de la cooperativa de viviendas.

El secretario de los gestores, Javier Ledesma, que fue nombrado por el juez que lleva el caso, manifestó que la solución de la crisis de PSV pasa por la segregación de las promociones. A su juicio, la soución a adoptar tendrá que respetar la igualdad de los acreedores y deberá ser aprobada por la intervención judicial.

En este sentido, Ledesma afirmó que PSV no será considerado un acreedor preferente, ya que esta opción sólo se extenderá, según la ley, a los acreedores hipotecarios y a los cooperativistas.

Por su parte, el Ministerio de Trabajo colaborará con la habilitación de un local para que los nuevos gestores puedan reunirse, aunque cualquier otra posibilidad de apoyo quedará supeditada alconocimiento de la auditoría que prepara Arthur Andersen.