El nuevo billete, más pequeño que los anteriores (130 milímetros de longitud y 65 de anchura), s el primero de una serie dedicada a personajes vinculados con el descubrimiento de América y que incorporan nuevas técnicas de seguridad para evitar falsificaciones.

Estas medidas de seguridad son el relieve perceptible al tacto de la impresión calcográfica multicolor, la marca de agua, el filamento de seguridad, y la coincidencia perfecta en anverso y reverso del motivo y los fondos litográficos multicolores.

Además, los nuevos billetes están pensados para que sean reconocidos por personas ciegs y con problemas de visión. Para ello, tendrá una marcas especiales situadas en la parte superior de la zona blanca del anverso que es perceptible al tacto y cada denominación (1.000, 2.000, 5.000 y 10.000 pesetas) tendrá un tamaño y color diferentes.

El director del banco emisor explicó que, si se observa el billete al trasluz, se pueden apreciar dos importantes elementos de seguridad, el filamento de seguridad y un retrato contrastado y con matices realizado mediante la técnica de marca de agua.

Por otra parte, y con ayuda de luz ultravioleta se pueden observar unas fibrillas fluorescentes de color rojo y verde dispersas por toda la superficie del billete e invisibles tanto a la luz del día como la artificial.

En la nueva pieza de papel moneda figuran, además de las efigies de los dos descubridores extremeños, símbolos autóctonos iberoamericanos, como la silueta del continente, la catedral de Lima, un jugador de pelota precolombino y el emperador de Moctezuma.