Ramón Marrero afirmó que "el acuerdo al que han llegado trabajadores y directivos de Gillette es un proyecto realmente ilusionante y toda una enseñanza para todas aquellas empresas que atraviesan por malos momentos".

Agregó que "el acuerdo en el caso Gillette ha puesto de manifiesto que a veces es mucho más práctico buscar soluciones como ésta, que en definitiva vienen a conservar los empleos, aunque sea con una actividad distinta".

Ramón Marrero, que hasta el momento había ocupado la viceconsejería de Trabajo y anteriormente la Dirección General de Industria, realizó estas declaraciones tras el acto de toma de posesión y juramento de su nuevo cargo en la sede del Gobierno andaluz en Sevilla.

Por otro lado, el comité de empresa de la factoría de Gillette en la localidad sevillana de Alcalá de Guadaira mantuvó hoy una nueva reunión con la dirección de la multinacional norteamericana para ultimar detalles del acuerdo alcanzado recintemente.

En este acuerdo los trabajadores se comprometen a hacerse cargo de la fábrica adquiriendo sus instalaciones por una cantidad que ronda los 100 millones de pesetas. Los trabajadores, que están pormenorizando algunos flecos jurídicos del documento, pretenden dedicar la factoría a partir de ahora a la producción de mangueras para fluídos especiales.