En el caso de las cercanías, de los 79.385 trenes que circularon en abril, el 97 por ciento (77.036) llegaron a sus destinos puntualmente. En los cuatro primeros meses, el índice de puntualidad fue inferior, del 95,7 por ciento, pero se situó por encima del objetivo de Renfe, que era del 94,5 por ciento.

Las cercanías de Asturias, Cádiz, Málaga y Bilbao son as más puntuales, especialmente Asturias, donde el 99 por ciento de los trenes llegaron a sus destinos a la hora prevista, mejorando en 1,9 puntos la puntualidad con respecto al año pasado.

En largo recorrido, la puntualidad de los trenes fue peor que en cercanías. En abril llegaron a su hora el 93,1 por ciento de los trenes, lo que supone una mejora de 0,7 puntos sobre el mes anterior y de 6,8 puntos sobre abril de 1992. Destacan los corredores País Vasco-Salamanca-Portugal, Madrid-Rioja-Navarra y Gaicia-Portugal, con una puntualidad del 99,1, 98,3 y 98,2 por ciento, respectivamente.

La mejora en puntualidad más importante se registró en los trenes regionales, cuyos índices de puntualidad aumentaron en 10 puntos con respecto al año pasado. El pasado mes de abril llegaron a su destino puntualmente el 91,8 por ciento de los trenes regionales.

Por lo que se refiere a los trenes de mercancías, hay que tener en cuenta que la puntualidad se mide de distinta manera, ya que se consideran puntuales ls trenes que llegan con un retraso igual o inferior a 60 minutos. En abril, la unidad de negocio de cargas consiguió una puntualidad en sus trenes del 76,7 por ciento, 13 puntos por encima de la lograda en 1992.

En el transporte combinado, el 82 por ciento de los trenes llegaron a su hora, frente a un 53 por ciento en 1992. La paquetería, con sus servicios de Paquexprés y Cargoexprés, logró una puntualidad del 94,2 y 83,3 por ciento en cada caso, muy por encima de los objetivos fijados por Renfe y de os niveles alcanzados en 1992 (68,6 y 38,7 por ciento).