El coste del cambio de los tres generadores de vapor asciende a 19.000 millones de pesetas y el año que viene se realizara en la unidad II, ya que, al igual que ha ocurrido en la central extremeña de Almaraz, se han detectado defectos de diseño en estos componentes, esenciales para el correcto funcionamiento de la central.

Los trabajos de sustitución los ha realizado un consorcio francoalemán, que también supervisará el cambio de los generadores de Ascó II en julio de 1996.

Las mismas fuentes señalaron que la operación del cambio de generadores en Ascó I ha sido "un éxito", a pesar de que la puesta en marcha de la central se ha retrasado una semana, como consecuencia de las anomalías que surgieron en los mecanismos de accionamiento de las barras de control, que obligó a cambiar tres bobinas.

Además, coincidiendo con la parada falleció un electricista de 26 años cuando manipulab una instalación eléctrica convencional de 220 voltios.

Izquierda Unida ha expresado su temor ante la posibilidad de que la sustitución de los generadores en las centrales de Ascó y Almaraz se financie con cargo a la tarifa eléctrica.