Este experto universitario explicó a Servimedia que "el juicio desde un punto de vista europeísta del referéndum galo sólo puede ser negativo, ya que envía a la basura más de dos años de serio trabajo".

Maíllo destacó que es especialmente desafortunado, ya que "se trata de una propuesta que aglutina el trabajo de parlamentarios de todo el continente con el objetivo de acercar al ciudadano el proyecto de integración para conseguir así una mayor legitimación" y que, además, "va a tener repercusión en otros referendos, como el de Holanda".

Asimismo, aseguró que "es muy difícil llegar a otro texto de consenso mejor que éste, ya que no se conocen cuáles son los puntos que deben renegociarse".

"Es un compromiso que ha costado muchísimo", agregó Maíllo, quien advirtió que "no se puede minusvalorar" el resultado de la consulta francesa, ya que revela que "hay algunos Estados, entre ellos algunos de los fundadores, que a causa de sus problemas internos no parecen dispuestos a dar un salto adelante en el proceso de integración". Preguntado por la posible salida a esta parálisis en el proceso de integración europea, Maíllo reconoció que "no la hay en el corto plazo. Hay que seguir con el proceso de ratificación e intentar que haya los menos 'noes' posibles y buscar una salida cuando el contexto lo permita".

Una de las causas que han llevado al "no francés" es el posible carácter poco social del texto constitutivo. Maíllo reconoce esta carencia, pero explica que, "al ser de compromiso entre distintas visiones europeas, es imposible quetenga carácter muy social si queremos contar con todos los países, incluyendo a Reino Unido".

Por ello, este experto lamenta que la izquierda francesa "quisiera más Europa social y haya conseguido menos Europa". En su opinión, "con una situación interna distinta en el país galo, el texto hubiera salido adelante".

Finalmente, Maíllo apuntó un aspecto positivo en el desarrollo del referéndum. Según este profesor de Derecho Comunitario "es admirable que haya habido un debate tan fuerte y que las conversaciones sobre el tema europeo hayan llegado a todos los contextos. La lástima es que se ha producido en la Francia de ahora".