NICOLAS REDONDO Y ANTONIO GUTIERREZ PASARAN EL AÑO NUEVO CON LOS MINEROS ENCERRADOS EN EL POZO BARREDO
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Los secretarios generales de UGT, Nicolás Redondo, y CCOO, Antonio Gutiérrez, aunciaron hoy que pasarán el día de año nuevo con los 36 miembros de las federaciones de Minería de los dos sindicatos, que llevan una semana encerrados a 400 metros de profundidad en el pozo Barredo de Hunosa, en el municipio asturiano de Mieres.
El anuncio coincide con el inicio, hoy, de una nueva huelga de siete días de duración, que llevarán a cabo los 18.000 trabajadores de la empresa minera en protesta por el plan de viabilidad del Ministerio de Industria, que prevé la desaparición de 6.000 puests de trabajo en los próximos años.
Por su parte, el alcalde de Langreo, el socialista Francisco González Zapico, promulgó hoy un bando en el que señala que ante la situación que se vive en las comarcas mineras pide a la población que apoye todas las acciones propuestas por las dos centrales y acuda a la concentración en el pozo Barredo prevista para el jueves 2 de enero, así como a la manifestación que se celebrará al día siguiente en Mieres.
El bando recoge también la exigencia de los 17 alcalde de los ayuntamientos mineros de Asturias para que Hunosa reanude las negociaciones del plan de viabilidad, de forma que el INI modifique el plan de futuro y garantice la supervivencia de Hunosa y de las comarcas mineras.
Hoy, durante la primera jornada de la nueva convocatoria de huelga, un grupo de trabajadores de Minas de Mieres, empresa de titularidad privada, y del pozo Pumarabule, explotación de Hunosa, ambas ubicadas en el concejo de Siero, se concentró esta mañana ante el ayuntamiento de esta ocalidad asturiana anunciando su pretensión de encerrarse en las dependencias municipales.
Después de mantener un diálogo durante media hora con el alcalde, el socialista Manuel Villa, el piquete abandonó su pretensión inicial, elaborando en cambio un comunicado en el que trasladan a la opinión pública asturiana el grave problema que para la comarca de Siero supone la crisis de la minería pública y privada.
SOMA-UGT: "ARANZADI ESTA LOCO"
La huelga fue hoy generalizada en todas las explotacionesde Hunosa, así como en otras independientes que se han unido espontáneamente al paro convocado por las centrales sindicales, que tendrá una duración de 96 horas en Hunosa y de 48 horas, jueves y viernes, en el resto de sector minero.
A lo largo de la jornada se produjo un recrudecimiento de los enfrentamientos en las cuencas del Nalón y del Caudal entre grupos de manifestantes y efectivos policiales.
En estos escarceos no se han producido heridos de consideración y tan sólo algunos mineros que pemanecían cerca del pozo Barredo sufrieron heridas leves por las cargas policiales.
Los enfrentamientos más graves entre trabajadores y fuerzas antidisturbios de la Guardia Civil y Policía se produjeron en el barrio Vega de Arriba, de Mieres, donde los mineros obligaron a las fuerzas de seguridad a retirarse en varios momentos ante la avalancha de piedras con la que hicieron frente a las cargas policiales.
Por su parte, el ministro de Industria, Claudio Aranzadi, afirmó hoy que el plan de Hunosa e lo mínimo que el Gobierno puede hacer ante las exigencias de la Comunidad Europea para situar en un estado aceptable la minería española ante de 1993.
A este respecto, el portavoz del SOMA-UGT, Ricardo López, respondió textualmente: "Este hombre está loco".
CCOO: "ACTITUD INTRANSIGENTE"
CCOO denunció, por su parte, la actitud intransigente del Gobierno por negarse a negociar una política industrial activa y aseguró que la "insensibilidad social" del Ejecutivo es lo que está provocando, "por un parte, la desertización industrial de nuestro Estado, siendo Asturias y la minería un caso paradigmático, y por otra, un clima de conflictividad social".
En un comunicado de prensa, esta central asegura que es la falta de una política industrial activa y el fracaso de la política económica la que genera una desertización industrial, empeora las condiciones de vida de los trabajadores y amenaza con el cierre de sectores productivos.
CCOO expresó también su apoyo a los 36 miembros de su sindicatodel SOMA-UGT encerrados en el pozo Barredo para impedir el cierre de Hunosa.
(SERVIMEDIA)
30 Dic 1991
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