NI LA CARIDAD NI EL MERCADO ACABARÁN POR SÍ SOLOS CON LA POBREZA EN EL MUNDO, SEGÚN ROBERT KATZ
- Ex analista del World Resource Institute y coautor de "Los 4.000 millones siguientes"
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Robert Katz, ex analista del World Resources Institute de Washingtonafirmó hoy que "ni la caridad ni el mercado resuelven el problema de la pobreza por sí solos, por lo que es preciso llegar a soluciones conjuntas".
Katz es coautor del libro "los 4.000 millones siguientes", donde analiza los hábitos de consumo de aquellas personas que gastan menos de 3.000 euros al año y demuestra la existencia de importantes oportunidades de negocio en este segmento de población.
Robert Katz explicó su libro durante un seminario promovido por la Comunidad de Madrid, la Fundación Accenture y Fundación Compromiso Empresarial.
Bajo el lema "Cómo hacer negocios en la base de la pirámide", el encuentro reunió hoy en Madrid a expertos, ONG y representantes del mundo empresarial con el fin de analizar la relación entre la incorporación al mercado de las personasdesfavorecidas y la mejora en sus condiciones de vida.
Según Katz, "para los seres humanos, la dignidad es más importante que la riqueza", de lo que se deduce que las personas prefieren incorporarse al sistema productivo antes que recibir limosna.
"En el mundo hay 4.000 millones de hombres cuyas necesidades de consumo están desatendidas", declaró Katz, quien señaló a "los precios excesivos (pagan un sobreprecio del 25% en arroz y maíz y del 37% por el agua), la mala calidad de los productos y la falta de infraestructuras de acceso" como las principales consecuencias de dicha situación.
El trabajo de Katz apunta también que las telecomunicaciones y los transportes son dos mercados con grandes oportunidades de crecimiento y presenta ejemplos de iniciativas de éxito en el terreno de los negocios para desfavorecidos, tales como las tiendas de medicamentos de calidad puestas en marcha en áreas rurales de México, India y Kenia.
Sin embargo, Katz subrayó que, para contribuir al desarrollo de las comunidades, "es preciso que las empresas se esfuercen por crear valor también en los países de origen".
Asimismo, recomendó apostar por la calidad, ya que "los pobres no quieren productos para pobres", y sugirió a los empresarios "enfocar la innovación en este colectivo concreto"
Por último, se mostró convencido de la necesidad de que las empresas lleguen a acuerdos con las ONG locales antes de entrar en los nuevos mercados. "Ello no solo permitirá conocer mejor las necesidades de estas personas, sino que garantizará su confianza", añadió.
(SERVIMEDIA)
27 Feb 2008
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