A juicio de los doctores Carlos Jiménez y Segismundo Solano, miembros del grupo de "Estudios sobre Tabaquismo" de la Separ, la primera batalla que debe emprender la sociedad es ayudar a los jóvenes a no caer en la trampa del tabaco.

Ambos neumóogos coinciden en que tanto padres como educadores deben explicar al niño los riesgos que conlleva la adicción al tabaco y, si fuman, no hacerlo delante de los menores o prohibir su consumo en las habitaciones de la casa frecuentadas por niños y adolescentes.

Los responsables de la Separ denuncian, una vez más, la presión publicitaria que los niños comienzan a percibir desde muy jóvenes y exigen a la Administración que cumplan las normas reguladoras sobre el tabaco.

La subida de los precios de la cajetillas de cigarrillos es otra de las medidas que proponen estos especialistas, ya que está demostrado que el incremento del coste del tabaco siempre se acompaña de una disminución del número de fumadores, especialmente entre la población jóven.