Una fuente de la Federación de Construcción de CCOO explicó hoy a Servimedia que esta noticia no es "muy tranquilizadora" y "nos preocupa".

La empresa ha convocado para este martes por la mañana a la comisión negociadora, formada por doce representantes de los sindicatos. Allí se les informará del número, el nombre y la distribución geográfica de los trabajadores que se verán afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

En la anterior reunión entre patronal y sindicatos, el pasado jueves, no quedó claro el número de personas que la empresa "pretende echar", si bien se baraja la cifra de 300 (la compañía cuenta con 800 trabajadores en total).

Según la citada fuente, una vez que se analice esta documentación, los sindicatos verán si hay razones económicas que justiquen el ERE. Si no las hay, se opondrán. Si se demuestra que hay motivos, buscarán un plan de viabilidad que garantice a los trabajadores que vayan a la calle "las mejores condiciones económicas posibles".

El portavoz del sindicato no quiso hacer previsiones ni "especulaciones" hasta conocer en detalle la documentación que aportará la empresa. "Todo dependerá del número de afectados por el ERE".

Finalmente, temió que la negativo del ICO a financiar a la inmobiliaria ponga en peligro la viabilidad de que las condiciones para los trabajadores despedidos sean buenas e, incluso, suponga un riesgo añadido: el de que, "en unos meses, se vuelva a dar esta misma situación y, detrás de estos 300, vayan más".