Las nuevas medidas del Gobierno elevan de 3 a 5 puntos el límite de la subvención a los préstamos para la contratación con los astilleros, y pueden beneficiarse de sta ayuda tanto los armadores españoles como aquellos otros domiciliados en la Unión Europea que contraten actividad con las plantas navales nacionales.

Asimismo, se elevan en 40.000 millones de pesetas los límites máximos de contratación anual que puede asumir la Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación (CESCE), con el fin de que esta firma estatal pueda asumir una mayor cobertura de riesgos en la contratación de buques por operadores exteriores.

Esta última medida forma parte de nuevo sistema de garantías por cuenta del Estado para la construcción de buques, aprobada en la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos del pasado jueves, a través de la CESCE, con el fin de adaptar esta normativa a las nuevas exigencias de la OCDE, que entrarán en vigor a primeros de 1996.

La normativa de la OCDE supondría la supresión de las ayudas directas a la construcción naval, así como las actuales primas, dejando abierta solamente la posibilidad a las ayudas indirectas, concedias a través de sistemas de garantía estatal, como se ha hecho ahora con la CESCE.