PETROLEO

NADAL DICE QUE MARAGALL SE LIMITO A HACERSE ECO DE UN RUMOR Y UN "CLAMOR LATENTE" AL ACUSAR A CiU DE COBRAR COMISIONES

MADRID
SERVIMEDIA

El consejero de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat de Cataluña, Joaquim Nadal, manifestó hoy que el presidente catalán, Pasqual Maragall, se limitó a hacerse eco, "en el fragor del debate político", de un rumor y un "clamor latente" al acusar ayer a CiU en el Parlamento autonómico de cobrar comisiones por obras públicas.

"El president dijo: 'saben que su problema se llama 3 por ciento', y no dijo más", declaró hoy Nadal en la Ser. "El president de la Generalitat puso sobre la mesa e hizo evidente en la Cámara parlamentaria algo que es un rumor y un clamor, pero que naturalmente, mientras no existan pruebas, se sitúa en este terreno del clamor latente".

Preguntado sobre si ha encontrado pruebas del cobro de comisiones por parte de CiU, el consejero respondió con otra pregunta: "¿Usted cree realmente que si el sistema de las comisiones existiese dejaría rastro documental? Estas cosas, cuando ocurren, normalmene no dejan rastro documental, y cuando lo dejan es evidente que alguien comete torpezas en el modo de hacer algo que es absolutamente ilegal pero que se ha dicho que ocurre".

"Yo no puedo afirma ni negar", continuó. "Simplemente le digo que en el terreno de la documentación que yo manejo no aparecen evidencias de este tipo, y por lo tanto yo no tengo elementos para acudir a la Fiscalía sobre esta cuestión".

"Pero más allá de esto, sí le puedo asegurar que yo he cambiado el pliego de condiciones de las empresas públicas que controlo para adjudicar obra pública, para que la discrecionalidad en la adjudicación, que es lo más que puedo decir, desaparezca", añadió.

DIMISIONES

Por otro lado, Joaquim Nadal afirmó que aceptó llorando las dimisiones del director general de Transportes y del presidente de la empresa pública GISA, al considerar que no son responsables de lo ocurrido en el Carmel.

Igualmente, reconoció que ha pensado en varias ocasiones en dimitir, "por egoísmo personal, para recuperar la tranquilidad que he perdido, para recuperar la sonrisa que he perdido, para dedicarme a escribir libros, para dedicarme a mi familia, a mi hijo y a un nieto que está viniendo".

"Me ha parecido que si esto era lo que me llevaba a pensar en dimitir, no era precicamente un buen motivo para dimitir", concluyó. "Yo quiero dar la cara por el Carmel y por lo que ha ocurrido en el Carmel, y hasta que no concluya todo el proceso del Carmel, aseguro que, aunque he pensado en dimitir, no pienso hacerlo. Y está en las manos del president -lo dije el primer día de la crisis- hacer conmigo lo que él crea más conveniente".

(SERVIMEDIA)
25 Feb 2005
CAA