Según ha informado la SEMG, la posibilidad de conocer la predisposición de una persona a padecer ciertas enfermedades permite poner en práctica planes de prevención a largo plazo, capaces de reducir la prevalencia de los principales problemas de salud.

En la actualidad, se conoce con cierta precisión la cartografía del genoma humano y más de 1.000 genes responsables de enfermedades o problemas de salud comunes, como el cáncer, la diabetes, los accidentes cardiovasculares y múltiples enfermedades neurológicas y psiquiátricas. En concreto, se ha demostrado que el 80% de las enfermedades del adulto tienen una base genética.

En los casos en que se determine tal propensión, se establecen unas pautas adecuadas de alimentación, hábitos de vida e incluso, en algunos cuadros, tratamiento, con el objetivo de impedir o retrasar la aparición de la enfermedad.

"Es fundamental que tanto la población general como los colectivos profesionales del sector sanitario se familiaricen con la medicina genómica y las múltiples posibilidades que ofrece en materia de prevención, diagnóstico y tratamiento", ha declarado el presidente de la SEMG, doctor Ramón Cacabelos.

La primera iniciativa de la SEMG es el desarrollo de un programa denominado Plan Pepric (Plan Español de Prevención de Riesgos Cerebrales), que tiene como finalidad educar y concienciar a la población española y al colectivo sanitario sobre la medicina genómica.