Así lo dijo el presidente de Mutua Madrileña, Ignacio Garralda, durante su intervención en el ‘XIV Encuentro Financiero’ organizado por el diario ‘Expansión’ y KPMG.

Ante el auge del uso del coche compartido, particularmente entre los jóvenes, y dado que “es una tendencia”, Garralda explicó que está en negociaciones con algunas empresas de ‘renting’, incluso internacionales, para asociarse en este segmento y ofrecer alquiler de coche durante unos años, pudiendo optar al final del contrato a su propiedad.

Con este negocio Mutua va a “cerrar el círculo” en movilidad, dado que ya cuenta con Voltio para alquiler por minutos u horas, y con Centauro, por días.

Sobre Voltio, Garralda avanzó que se va a incrementar la flota actual, de 1.000 vehículos en Madrid, y “seguramente” llegará a otras ciudades españolas. Y de Centauro apuntó que ha registrado en los últimos años unos márgenes “enormes” y le queda por adquirir un 7% que “seguramente compraremos el año que viene”.

En el caso de la posible alianza en ‘renting’, precisó que Mutua no se haría con el 100% de la propiedad porque el negocio en sí “ya tiene una carga financiera de comprar coches que sería llenar nuestro balance de hierros”.

En cuanto a la parte aseguradora y al ramo de autos, Garralda descartó que haya una guerra de precios y lo consideró una “competencia muy viva” azuzada por el repunte de la inflación. “Todo el sector nos hemos visto un poco obligados a subir, unos más que otros, cada uno tiene su política comercial, nosotros hemos subido, pero hemos estado en la banda baja”, afirmó. Indicó que este año se ha congelado la tarifa a un tercio de la cartera, en lugar de a los dos tercios que venía haciéndolo, y se ha subido un 3,5% el precio al resto.

Destacó que los autos y Madrid ya pesan un 20% cuando antes era el 80% y pronosticó que el próximo año se firmen tantas pólizas en Madrid como fuera de la capital.

Sobre la inversión en fondos y planes de pensiones, Garralda afirmó que quieren crecer en la parte de fondos de inversión y de pensiones y en la parte de vida-ahorro o rentas vitalicias, al entender que “hay que estar en los dos lados porque cada cliente tiene su perfil de riesgo”, más aún "si los bancos están remisos” para remunerar los depósitos.

Por último, sobre el escenario macroeconómico, Garralda señaló que el próximo año será “difícil” por el impacto en el consumo de la restricción de crédito. “Lo que me da más miedo es el cisne negro de que la prima de riesgo, que es un ente que está dormido, se despierte”, después de que lo haya hecho en unos 25 puntos básicos en los últimos dos meses. “Espero que no siga subiendo porque eso sí que complicaría la vida a España”, confió.