MURUROA. LA FLOTA DE LA PAZ COMIENZA A REUNIRSE EN TORNO A LA ZONA DONDE LOS FRANCESES PRETENDEN REALIZAR LAS PRUEBAS NUCLEARES
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Xavier Pastor, portavoz de Greenpeace a bordo del barco "Rainbow Warrior", situado en la zona del atolón de Mururua, aseguró hoy a Servimedia qe las primeras embarcaciones que compondrán la "flota de la paz" contra las pretensiones francesas de realizar pruebas nucleares en esta zona de Pacífico Sur comienzan ya a llegar a las inmediaciones de la colonia gala.
Desde el barco insignia de Greenpeace se controlan las actividades y situación de al menos cincuenta embarcaciones que se acercan a la zona para presionar a las autoridades galas y actuar "en el momento en que tengamos el más mínimo indicio de que se produce algún tipo de prueba nuclea". "Nuestra intención es intentar paralizar las primeras pruebas y no descartamos alguna actuación", puntualizó el portavoz.
Pastor calificó de "rutina" el hecho de que sean seguidos a todas partes por la fragata de la armada francesa y aseguró que "nos mantenemos estrictamente en la línea de las doce millas para que no argumenten ningún tipo de justificación para detener a algún barco".
"Por ahora nos mantenemos en esa distancia en espera del núcleo de la 'flotilla por la paz', que ya empiezan allegar", aunque puntualizó que será en la próxima semana cuando se concentre el mayor número de barcos veleros, incluso "muchos que no teníamos pensado que llegaran aquí".
El "Rainbow Warrior" actúa como barco nodriza para el resto de los veleros, siempre en contacto por radio para comunicar posibles incidencias, si bien se espera que Chirac "haya pensado mejor la acción y haga caso a los 150 países del mundo que se han posicionado en contra de las pruebas nucleares, además de que el 60 por ciento de os franceses estén contra la posición de su presidente".
Pastor se mostró sorprendido por el "nerviosismo y la preocupación" de las autoridades francesas, que ha quedado de manifiesto en la prohibición "en un país tan democrático", de la iniciativa de Greenpeace que pertenecía que el próximo 1 de septiembre una pequeña flotilla ascendiera por el río Sena hasta París, y una cadena humana transportará desde los barcos al Palacio presidencial francés los más de tres millones de firmas recogidas en todo e mundo contra las pruebas nucleares.
Hasta el momento, Greenpeace no se ha unido a la postura de boicotear los productos franceses "porque creemos que existen otros medios", pero a partir de la primera prueba nuclear ese boicot podría estar ya justificado.
No obstante, el miembro del grupo ecologista calificó de "valiente" la postura de algunos comerciantes que rechazan productos franceses o cualquier otro tipo de boicot al gobierno galo.
El pasado fin de semana, el ministro francés de Ultraar, Michel de Peretti, visitó la zona donde se van a celebrar las pruebas y calificó de "innegociables" los próximos ocho ensayos "absolutamente necesarios para asegurar la capacidad de disuasión nuclear francesa".
(SERVIMEDIA)
30 Ago 1995
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