Tras lamentar lo ocurrido en Carrizo de la Ribera (León), donde un hombre mató a su mujer y posteriormente se ahorcó, Murillo explicó que el Gobierno "ha endurecido las penas y castiga también la vulneración de la orden de alejamiento como delito", además de considerarse la amenaza y la coacción como delito.

La secretaria de Estado, que participó hoy en los Cursos de Verano de la Complutense, indicó que las relaciones de pareja "deben sumar siempre, respetar los proyectos de cada uno y la autonomía", y no convertirse nunca en "relaciones de dominio". Por ello, afirmó que en cuanto aparezca el primer signo de dominio, "hay que dar por finalizada esa relación".

Preguntada por la saturación de trabajo en los juzgados, dijo que el Ministerio de Justicia reforzará los equipos y estará en contacto con cada comunidad autónoma, con el fin de conocer "en qué medida necesita incrementar la atención a aquellas personas que presenten las denuncias".