En una nota, Amac subraya que no aceptará "en ningún momento lecciones de transparencia y democracia de las organizaciones que, como Greenpeace y Ecologistas en Acción, se limitan a bombardear a través de rumores y mentiras la búsqueda de una solución a un problema que tienen nuestros territorios".

La organización explica además que en el proceso de elección de las poblaciones candidatas a albergar estos residuos, puesta en marcha por el Gobierno, los ecologistas no han querido participar.

En su momento, los grupos ecologistas fueron invitados a participar con el fin de obtener su opinión en este proceso, "una invitación que rechazaron negándose a buscar una solución al problema de los residuos, si antes no se cerraban las centrales nucleares".

En este sentido, Amac expresa que "lo único que buscan estos grupos es intoxicar a la opinión pública y especialmente a los ciudadanos de estas zonas a través del más puro alarmismo y el rumor, lo cual no es, precisamente, un ejemplo de transparencia".

Por ello, la organización dice no entender "cómo puede negarse desde el mundo ecologista la solución a la gestión de unas sustancias que, según ellos, son altamente peligrosas y tóxicas y que actualmente se almacenan en nuestras zonas en instalaciones debidamente controladas, pero de carácter provisional".

No obstante, Amac asegura que en ningún momento aceptará la utilización política que pueda hacerse de la solución a los residuos radiactivos de alta actividad y reitera su voluntad de colaborar con el Gobierno en la búsqueda de una solución para la construcción de un almacén temporal centralizado en España.