MULTINACIONALES DEDICADAS A LA GESTION DE RESIDUOS TOXICOS INTENTAN LLENAR ESPAÑA DE INCINERADORAS, SEGUN GREENPEACE

MADRID
SERVIMEDIA

Varias empresas extranjeras dedicadas a la gestión y tráfico de residuos tóxicos tienen la intención de construir diversas plantas de incineración en las dos Castillas y Madrid, según denunció hoy a organización ecologista internacional Greenpeace.

Los conservacionistas mantienen que los municipios de Cazalegas (Toledo), Valdilecha (Madrid), Monteagudo de las Vicarías (Soria) y Almadén (Ciudad Real) han recibido propuestas de estas multinacionales para instalar incineradoras de residuos tóxicos.

En Cazalegas ha sido la empresa francesa Tredi, a través de su flial española Cartera Ambiental, la que ha formulado la propuesta, mientras que en Monteagudo de las Vicarías fue la empresa Trepaud,también gala, a través de su socia española Gamesa, la que intentó instalar una planta con capacidad para tratar 30.000 toneladas de residuos al año.

En Valdilecha, localidad situada al sur de Madrid, la empresa francesa Sarp llegó a invitar, según Greenpeace, a los habitantes del pueblo a realizar una visita a Francia. Sin embargo, la oposición vecinal hizo que el Ayuntamiento desestimase el proyecto el pasado 19 de julio.

Finalmente, la multinacional americana Waste Management Incorporated (WMI se ha asociado a la empresa pública española Mayasa para instalar en Almadén una incineradora de residuos tóxicos con capacidad para tratar 45.000 toneladas al año.

Greenpeace mantiene que WMI es la empresa más penalizada en los EE.UU. por cometer delitos ecológicos y afirma que "Mayasa es conocida en España por protagonizar el escándalo de importación y vertido de 11.000 toneladas de residuos tóxicos".

Asimismo, señala que todas las comarcas donde las empresas extranjeras pretenden instalar lasincineradoras son rurales y están deprimidas económicamente, su población trabaja fundamentalmente en el campo y la ganadería y no tienen cerca ninguna zona importante de generación de residuos tóxicos.

Según la organización ecologista, España es el país europeo con mayor número de propuestas de construcción de plantas de incineración de residuos tóxicos, por delante de Irlanda, Grecia y Portugal.

A juicio de Dolores Romano, portavoz de Greenpeace, "la empresas dedicadas a este negocio están tenindo dificultades para instalarse en los países del norte ante los graves problemas que genera sobre la salud pública, el medio ambiente y el desarrollo económico de las zonas donde se instalan".

"En las regiones castellanas", agregó, "con baja población, mínimo control ambiental y deprimidas económicamente, estas multinacionales ven un lugar ideal donde instalarse. Castilla-La Mancha y Castilla y León son firmes candidatas a convertirse en basureros tóxicos, no sólo del resto de las regiones españolas sino también de los países europeos".

(SERVIMEDIA)
13 Ago 1992
GJA