La mujer del etarra pagó un total de 46.438 euros por el 50 por ciento de la cristalería y el 50 por ciento del almacen, mejorando así la oferta de la única otra persona que se presentó a la subasta, cuya identidad no ha trascendido.

La subasta se produjo por orden de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que en 2006 decidió impulsar esta medida para que Azpiazu hiciera frente a la indemnización que por sentencia debe a Pilar Elías, viuda de Ramón Baglieto, en cuyo asesinato en 1980 participó el etarra.

Se da la circunstancia de que la vivienda de Elías se encuentra en el mismo edificio de Azkoitia en el que Azpiazu tiene su cristalería.

Se subastó sólo la mitad de la cristalería y del almacen ya que el negocio está a nombre del etarra y de su mujer, por lo que legalmente sólo es propietario del 50%. Con esta operación, Altuna es ahora propietaria de la totalidad de los locales.

En concreto, Altuna pagó 22.575 euros por la cristalería,cuyo precio de salida era de 32.235 euros, y 23.863 por el almacén, que inició la subasta con un precio de 34.088 euros.

La mujer de Aspiazu ofreció desde el principio el 70 por ciento del precio de salida de los dos locales, una puja que no pudo ser superada por el otro postor, por lo que finalmente se quedó con las propiedades.

Altuna deberá ahora abonar los 46.438 euros de la subasta en una cuenta bancaria fijada por la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, un dinero que servirá para hacer frente a las deudas contraídas por Aspiazu con sus víctimas.