MUERE LA VICTIMA NUMERO 23 DEL ACELERADOR DE ELECTRONES DEL CLINICO DE ZARAGOZA
- De los 27 pacientes afectados por el exceso de radiaciones, sólo cuatro siguen vivos
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Julio Bazán Samitier, uno de los pacientes afectados por el accidente del acelerdor lineal de electrones del Hospital Clínico de Zaragoza, falleció el pasado domingo en el Servicio de Oncología de este mismo centro sanitario. Con su muerte se eleva a 23 el número de personas que han fallecido tras ser tratadas con el acelerador durante los diez días en que éste estuvo averiado.
Bazán Samitier, de 45 años, era uno de los pacientes más jóvenes de los que recibieron exceso de radiaciones. Director de banco, casado y con tres hijos, ingresó en el Clínico el pasado viernes aquejado deuna grave insuficiencia respiratoria provocada por una diseminación tumoral que había alcanzado los pulmones.
Durante la celebración del juicio, que tuvo lugar en febrero de 1993, Bazán fue el único paciente afectado que testificó, ya que su estado en aquel entonces era el más satisfactorio.
En el banquillo de los acusados se sentaron once personas: diez trabajadores del Hospital Clínico y el técnico de General Electric Mariano Compte.
Los hechos se remontan a diciembre de 1990, cuando 27 paientes de Oncología del Hospital Clínico fueron sometidos a los efectos del acelerador de electrones durante el tiempo en que éste estuvo averiado, sin que nadie se percatara de lo que estaba ocurriendo.
Durante una revisión rutinaria del aparato, Compte, el técnico encargado del mantenimiento de la máquina, manipuló el acelerador de manera que, independientemente de la potencia con la que se programara, siempre irradiaba la energía a su máxima potencia.
(SERVIMEDIA)
03 Mayo 1994
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