MUERE LA VICTIMA NUMERO 22 DEL ACELERADOR DE ELECTRONES DEL CLINICO DE ZARAGOZA

ZARAGOZA
SERVIMEDIA

Hoy falleció en el Hospital Clínico de Zaragoza Pilar Funes, uno de los 27 pacientes que recibieron exceso de radiación en el acelerador lineal de electrones de este centro hospitalario mientras permaneció averiado dicho aparato, del 10 al 20 e diciembre de 1990.

Con el de esta mañana ya son 22 los pacientes fallecidos. Pilar Funes, de 45 años de edad, residía en Alcorisa, Teruel, estaba casada y tenía un hijo de 21 años. En los últimos meses había sido ingresada en numerosas ocasiones.

Pilar Funes es la segunda vítima que fallece tras el juicio y la publicación de la sentencia condenatoria contra el técnico de General Electric encargado de la reparación del acelerador, Mariano Conte, y contra la empresa como responsable civil subsidiria.

La primera víctima después del juicio fue José Magén Valenzuela, que falleció, tras once días de estar ingresado, el 18 del pasado mes de junio.

Entre el 10 y el 20 de dciciembre de 1990 un total de 27 pacientes oncológicos fueron irradiados con exceso en el acelerador de electrones del Hospital Clínico de Zaragoza.

La sentencia del Juzgado de lo Penal número 1 consideró único culpable del accidente al técnico de General Electric que reparó la máquina. También condenó a la empresa al pao de 418 millones de pesetas como responsable civil subsidiaria.

El resto de los inculpados, es decir, la directora del hospital, médicos, radiólogos y enfermeras, que estaban al tanto del tratamiento de las víctimas, resultaron absueltos del trágico suceso, alegando principalmente que ellos no podían saber que los enfermos estaban siendo sobreirradiados debido a que la aguja que marcaba la densidad de las radiaciones estaba atascada.

Esto fue criticado en más de una ocasión por las víctimas que ún sobreviven y por los familiares, que decían que ni los médicos ni las enfermeras prestaban atención a las quejas de los enfermos, quejas a raíz de que ellos presentían que la radiación a la que se sometían era exagerada por las ulceraciones que tenían en la piel.

(SERVIMEDIA)
16 Jul 1993
C