La puesta en marcha del Plan de Vivienda no ha conseguido elevar el número total de casas construidas, pero sí ha tenido un efecto radical en cuanto al tipo de vivienda promovida, al dirigir a los constructores a la edificación de pisos potegidos.

En concreto, de las viviendas empezadas en el primer semestre, casi 66.000 eran libres, un 17,6 por cien menos que en el año anterior, mientras que las de protección oficial se elevaron a casi 20.000, lo que supuso un incremento del 33,2 por cien.

Sin embargo, los datos del MOPT también muestran que este cambio de orientación puede no mantenerse en el futuro, según pone de manifiesto la información disponible tanto sobre viviendas terminadas como sobre las proyectadas para su construccin.

Las viviendas terminadas en el primer semestre del año fueron 105.160, un 10,1 por ciento menos que en idéntico periodo del ejercicio anterior, pese a que éste ya fue extraordinariamente negativo en ese aspecto, con una caída global del 19,2 por cien.

También en este caso, el descenso se concentró en las viviendas libres, que no reciben ninguna ayuda pública, de las que se edificaron 84.660, un 13 por cien menos. Las de protección oficial aumentaron un modesto 4,3 por cien, hasta situarse en ago más de 20.500, aunque con una clara tendencia positiva conforme avanza el año.

FUTURO PROBLEMATICO

Sin embargo, el dato que más llama al escepticismo es del de viviendas proyectadas para su construcción en un futuro próximo y ya visadas por los Colegios de Arquitectos, puesto que se situaron en 114.240 en el primer semestre, cifra que representa un descenso del 18,5 por cien.

Las viviendas de protección oficial edificadas ascendieron a 31.470, con un aumento del 4,5 por ciento, mientras que as libres se situaron en 82.750, lo que representa un descenso del 25 por cien.

A la vista de estos datos, el último informe de la Dirección General de Previsión y Coyuntura del Ministerio de Economía llama la atención sobre que la "la actividad privada en edificación y vivienda no termina de relanzarse" y aduce como prueba "indicadores como el de las viviendas iniciadas" y el consumo de cemento, que disminuyó un 13 por cien hasta setiembre.

Los expertos del Ministerio de Economía destacan que esa evolución negativa se produce a pesar de que la licitación oficial de obras públicas aumentó un 70 por ciento en los nueve primeros meses de este año.

A pesar de ello, las encuestas de opinión empresarial del sector reflejan un notable empeoramiento en la segunda mitad del año, lo que, a juicio de Economía, refleja "la incertidumbre actual sobre el mantenimiento de una recuperación que se venía observando desde comienzos del año".

Las últimas previsiones formuladas por la Confederación Nacionalde la Construcción apuntan a que el sector registrará este año una producción inferior en un 6 por ciento a la del ejercicio del 92.

La patronal cree que lo más probable es que en 1994 el sector constructor se estanque, sin crecimiento ni descenso de la facturación en relación al año precedente, y que la reactivación se posponga hasta 1995.