Caballé, que no quiso comentar, "por desconocimiento", las últimas críticas vertidas en Santander por su colega Victoria de los Angeles acerca de este tipo de conciertos, agregó que "normalmente los precios en los teatros son muy elevados y este tipo de actos los abarata".

La diva catalana actuará por rimera vez en España junto a su hija, Montserrat Martí, en un concierto que, en beneficio de Ruanda y organizado por Medicos de Mundo, se celebrará esta noche en la catedral de Palma. Al acto asistirá la reina doña Sofía.

Madre e hija actuaron juntas por primera vez el pasado 9 de octubre de 1993 en Londres. Después celebraron otros dos conciertos, pero hasta hoy ninguno en España. Caballé hace suya una definición de un crítico inglés que "situó nuestra voces en una misma línea de armónicos que conjugn bien, aunque, en todo caso, son voces distintas".

Madre e hija viajaron hasta el aeropuerto de Palma en un vuelo procedente de Barcelona, adonde llegaron anoche desde Atenas. En la capital helénica preparan un concierto producido por Vangelis. "Cuando Médicos del Mundo nos propuso participar esta noche no encontramos fecha posible, pero al final se arregló y es un honor cantar por una causa tan bonita", dijo.

Las dos han elegido obras de Heandel y Mozart, "siguiendo la misma línea del resto de úsicos, porque el concierto merece una dedicación íntima y profunda", aunque adelantó la interpretación de dos obras de Puccini que interpretarán al unísono.

Por su parte, Montserrat Martí explicó que su afición por el canto la tuvo siempre, aunque "estudié a escondidas mientras oficialmente trabajaba sólo en ballet clásico". Hace tres años un hermano de Montserrat Caballé pidió a la diva catalana su asistencia a una prueba de una "nueva cantante" para trabajar en una obra común.

"Mi marido y yo sistimos y llegada la hora no vimos a nadie en el teatro que no fuera conocido", señaló Caballé. "De repente alguien empezó a cantar y mi marido y yo nos quedamos mudos. Era nuestra hija. Fue una gran sorpresa", confesó.