Montero compareció a las 9.00 horas en el Pleno del Congreso, a petición del PP, para informar “sobre el sistema de financiación singular y el secesionismo fiscal que ha acordado con sus socios de forma bilateral y fuera del sistema de financiación de comunidades autónomas de régimen común, a cambio de presidir la Generalitat de Cataluña y seguir presidiendo el Gobierno de España”.

La ministra aseguró que la financiación singular de Cataluña “no supone ninguna quiebra” de la solidaridad interterritorial, ya que, a su juicio, el acuerdo entre el PSC y ERC permite que para “un gallego, un extremeño o un valenciano la provisión de servicios que proporciona su comunidad autónoma esté al mismo nivel de la que tiene un catalán”. “Eso sí”, puntualizó, siempre y cuando estas regiones “lleven a cabo un esfuerzo fiscal similar”.

Sin embargo, evitó dar detalles de cómo se aplicará y se llevará a cabo la financiación singular del territorio y dedicó más de la mitad de su discurso a emitir críticas y ataques contra el PP.

Se trata de la segunda vez que la ministra comparece en el Parlamento por este motivo en este mes, después de que el pasado 4 de septiembre hiciera lo propio en el Senado.

Montero se mostró “encantada” de “volver” a explicar el acuerdo que hizo posible que ERC apoyara la investidura del socialista Salvador Illa como presidente de la Generalitat y leyó literalmente del acuerdo que “una financiación justa y singular es compatible con la contribución equitativa al sostenimiento del gasto del Estado que redunda en beneficio de los ciudadanos de Cataluña y en la solidaridad entre territorios”.

Pidió a los ‘populares’ dejar de “hacer política en España contra Cataluña” porque “el único interés que los motiva es que Cataluña nos roba, el discurso del victimismo y del agravio”. “No pueden soportar que la política del reencuentro esté dando resultado”, añadió, pese a que señaló que el Gobierno “no va a caer en este tipo de provocaciones”.

ELEMENTOS PARECIDOS AL CUPO VASCO Y NAVARRO

La ministra reconoció que en el acuerdo firmado con ERC “hay algunos elementos que tienen que ver con los clásicos conciertos vasco y navarro”, por lo que “alguno puede pensar y le puede llamar concierto económico solidario”.

“Otros le pueden llamar reforma del modelo de financiación o que no es un concierto”, dijo, pero incidió en que “no se trata de poner nombres, sino de mirar qué persigue”.

CRÍTICAS DEL PP Y JUNTS

En el turno de réplicas, el vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo, instó a Montero a quitarse “la careta” y aceptar que su “cambio de opinión” con la financiación singular de Cataluña es “una traición a los principios de convivencia que nos unen”.

Censuró “las mentiras” vertidas por la ministra durante su comparecencia y deploró que la vicepresidenta trate de “chantajear” a la oposición con unos 12.000 millones para sus comunidades si no apoyan la senda de déficit, cuando no ha “llamado” a Génova para intentar negociar nada y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, abogó por levantar “un muro” para “aislar” a la derecha en su investidura.

Asimismo, expresó la disposición de las 14 comunidades y ciudades autónomas en las que gobierna el PP a negociar desde la “multilateralidad” una reforma de la financiación autonómica siempre que el sistema “sea para que todos ganen”, no solo Cataluña.

Por su parte, Junts volvió a urgir a Montero a que aclare si el acuerdo entre PSC y ERC es un “concierto económico” o “electoralismo barato”. “¿El acuerdo que firmaron es un concierto económico? ¿Sí o no? ¿Representa el final del déficit fiscal de Cataluña? ¿Sí o no? ¿Es una financiación singular para Cataluña? ¿Sí o no? Son tres preguntas fáciles, no lo ponga difícil”, preguntó Josep Cruset, diputado de la formación independentista, a Montero.

En este sentido, reconoció que sospecha que ERC ha investido a Illa “a cambio de nada”. Y comparó este acuerdo con la mesa de diálogo, que se anunció “a bombo y platillo” que se reuniría todos los meses y, finalmente, solo celebró tres encuentros “en cuatro años” como contrapartida del apoyo de ERC a los Presupuestos de 2021 y 2022.

Por su lado, ERC aseguró que es un “insulto” que Junts les esté acusando de apoyar a los socialistas “a cambio de nada”, en referencia a que no estarían obteniendo suficientes contrapartidas ni en el Congreso ni en el Parlamento catalán.

MÁS COMPETENCIAS A LAS REGIONES

El diputado de Podemos Javier Sánchez Serna demandó que las comunidades autónomas "asuman más competencias" y aseguró que su formación no se "opone" a la singularidad que defiende el Gobierno. La diputada de Sumar Aína Vidal pidió a Montero que aplique la singularidad a los territorios porque "es compatible con el resto de criterios" sobre financiación autonómica.

El PNV aseguró que la financiación singular para Cataluña "no es" ni como el cupo vasco ni el convenio navarro, por lo que reclamó que no se mire "de reojo" a estos sistemas diferenciados.

El diputado del BNG, Néstor Rego, avisó de los efectos negativos que tiene para la ciudadanía la “demagogia” y la “manipulación” del PP, y arremetió contra la Xunta por no acogerse a la condonación de deuda propuesta por el Gobierno por “batallas partidistas” y negarse a negociar una financiación singular para Galicia.

ACUERDO "ESPURIO"

El diputado de UPN, Alberto Catalán, rechazó la financiación singular de Cataluña porque considera que es un “acuerdo espurio que obedece única y exclusivamente a la compra de votos para mantenerse en el poder” y “es fruto del mercado”. Y opinó que “vulnera principios básicos de la democracia” y pone “patas arriba” los “consensos constitucionales”, como afirmó el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page. “Si lo dicen los suyos, ¿qué vamos a decir los demás?”, añadió.

El diputado de Vox Pablo Sáez Alonso-Muñumer afirmó que el acuerdo “es la manifestación escrita de una conspiración criminal”.